martes, 12 de octubre de 2010

Steve Dómine (Parte II)


El problema en caer en la zona de los mejores amigos no tiene que ver con que no pueda existir la amistad entre hombres y mujeres, de hecho, yo tengo muchas amigas invaluables. El detalle está en caer en ese asqueroso pantano donde terminas siendo más bien una "Amiga" o un "Novio sin derecho", como me comentaba una amiga el otro día, mientras me describía su relación con un chico que estaba enamorado de ella y la seguía a todas partes.


Textualmente, me decía: "Se comportan como novios, te aprovechas de ese hecho, pero no les das derecho. Te acompañan de compras, te ayudan a hacer el trabajo de la universidad, te prestan dinero, te traen el café, son el psicólogo de tu relación (de la relación que tienes con tu verdadero novio) y al final cuando te preguntan ¿qué me gané?, ¿un beso? Na! Les das un ticket de metro.."

Es en resumen, entregarte a una relación que no va a ningún lugar favorable para tus objetivos o tus sentimientos. Es estancarte, sin miras a una relación de verdad.

Desde que la ví, supe que ella era más especial que cualquiera. Era como cuando pierdes algo en mitad de tu casa. Sabes que está ahí. Conoces cómo es, y por qué lo quieres. Pero no lo encuentras! Y por más que buscas no está! Hasta que un día, sin buscarlo, se te presenta.


De pronto me miró a los ojos y me dió un escalofrío. Muchos de mis maestros me habían advertido ya de esto y yo pensé haberlo internalizado. Enamorarse de alguien a primera vista es una ilusión. Eso no existe. Es otro invento del cine, de los cuentos de hadas, de la sociedad y de las hormonas. No puedes amar a alguien que no conoces. Es hasta razonable y fácil de entender. De hecho es la principal causa del despecho. Con todo eso en mente, me bloquié. Al menos hice lo que pude. Casi me era imposible evitar las ganas de llevármela de ese lugar lleno de gente y practicar todo lo que aprendí, por última vez. Dejarla tan enamorada que casi tuviera que ponerle una orden de restricción para dejarla de ver de vez en cuando.


Cada vez que me veía a los ojos, era como si lo demás desapareciese. Y de repente me abstraje de mi cuerpo (gracias Toecutter! ;P) y nos vi haciendo lo que hacíamos. Casi hasta tomé el tiempo. Fueron más de 30 segundos de una mirada intensa. 30 segundos es muchísimo! Si entre nuestros ojos habrían existido un par de hilos tensándose con cada mirada, durante esa, seguro tendríamos que haber comprado unos hilos de Titanio o Adamantium o de Tela de Araña super reforzada para que no se rompiera. Entendí que no estaba enamorado sólo. Pero aún así, ¿quién era esa chica? ¿Qué tal si era una de esas mujeres que inconcientemente quiere tener un hombre que las maltrate? Porque definitivamente yo no soy ese hombre. O alguna de esas otras tantas que sólo atraen malas energías, de esas personas que al acercarte sientes que toda tu fuerza es atraída hacía ellas... como un hoyo negro de mucha mala energía. Podía ser cualquiera!


Era claro. Me propuse la meta de conocerla. Tenía que salir con ella, hablar con ella, saber quién era y si de verdad era lo que estaba buscando. Irónicamente, en el proceso de hacerme una persona valiosa me ocupé muchisimo: estudio ing. mecánica, estoy constantemente en cursos de idiomas, asisto a clases de música, adoro la guitarra y toco la batería en un grupo, leo todas las noches y hago otro sin fín de cosas. Eso demanda mucho de mi tiempo y generalmente estoy con mi agenda hasta el tope. Eso es bueno, es una pieza clave para volverte la mejor version de tí mismo. Pero evitó, en mi caso, abrirle un espacio a esta chica. A duras penas podía escribirle en las noches. Ella no lo sabe, pero sacrifiqué mi lectura nocturna para ello. No le vayan a decir! Es importante, pero no quiero que se le suban los humos.


Todo iba viento en popa. Después de aproximadamente 3 días de interacción con la chica, repartidos en más o menos 2 semanas desde el día en que la conocí, ella no sólo estaba lista para salir conmigo, estaba ansiosa. Quién sabe si más que yo. Pero había algo que me perturbaba.


Comprenderán que es una chica hermosísima. Así que yo no soy el único que está detrás de ella. Y eso fue algo que pude observar desde el principio. Yo no era el único que la miraba y eso era un mal pronóstico. Sobretodo porque sabía que los otros que la buscaban tenían una ventaja considerable: Tiempo. Me era imposible compartir todo el día con ella. Concretar una cita con hora y fecha me costaba cada vez más, pero no podía contra mi optimismo. Cada día me levantaba y buscaba la manera de contarle a una persona nueva lo mucho que me gusta esta mujer. Como si evitar pensar en la presencia de esos otros pretendientes y concentrar mis energías en lo que quería los haría más débiles.


La conocí un lunes y exactamente 3 semanas después de verla por primera vez en mi vida, sabía que tenía que hacer el movimiento definitivo y salir con ella. Deshacerme de mis deberes y dedicar un gran espacio de mi tiempo a estar con ella en persona, a solas. Pero era demasiado tarde. Justo esa noche, mientras concretaba la cita, durante nuestra conversación habitual lo confesó: "Tengo un problema emocional.." Sólo leer esa frase me hizo entender que se sentía atraída por varios chicos y no sabía qué hacer. Pero nunca esperé su respuesta, justo después que casi como una orden le dije: "Mañana es el día, tenemos que salir" Obviamente, para evitar la atención a ese "problema emocional".


Pero eso no bastó. Me contó lo que le sucedía. Habían dos pretendientes más que lograron tocarla en cierta medida. Uno más que otro. Pero entre sus líneas podía leerlo, de tercero estaba yo, que con todo y mi falta de prescencia, seguía apareciendo en su mente y en su pecho.


"El primero me parece lindo y me cae bien y quiere algo serio conmigo. El segundo, es diferente, tiene algo más que me hace sentir especial.... Pero te voy a ser sincera, por tí siento algo como lo que siento por él. Son esas ganas de querer lanzarte sobre alguien cada vez que lo ves y besarlo. Siento que te quiero y si salgo contigo sólo estaré más confundida."


Es una paráfrasis, desearía haber guardado el texto original. Inmediatamente, con toda la honestidad que tengo, rompí mi juego indirecto y como ella acababa de hacer, le conté todo lo que sentía. Aunque quizás no fue todo, quizás debí decirle más, tanto como les cuento a ustedes hoy.


Y me respondió: "Desearía que esa chispa que tienes nunca se apagara. Eso que me gustó tanto de tí desde un principio...." - comenzó diciendo, y más adelante, tras varias palabras siguió - "Y también quisiera, que desde ahora, siguieramos hablando sólo como amigos. Podemos salir después que yo aclare mis sentimientos. Pero que me trates como tu amiga. Por que se que si salgo contigo ahora, puedo enamorarme perdidamente de ti, yo me conozco."


Estaba justamente en ese lugar donde me advirtieron que nunca debía estar. Estaba terriblemente confundido. Sentía una alegría tremenda porque esta chica, de la que me enamoré a primera vista (cosa increible!) de verdad sentía algo por mí y lamentaba tanto como yo que las circunstancias nos apartaran. Pero por otro lado, sentía que quería despegar los pies del piso y salir corriendo. Evitar a toda costa volverme su "Amiga". Estaba en el lugar que siempre anhelé, pero quería huir de ahí.


Y precisamente en ese lugar fue que lo comprendí todo. Hoy tú me hiciste recordar qué fue lo que me trajo hasta tí. Sólo tú sabes qué fué lo que te dije después y sólo tú sabes lo que respondiste a eso. Escuchar esas palabras de la persona que más quieres en este mundo no es lo peor que te puede pasar. Lo peor que te puede pasar es no darte cuenta que tienes opciones. Lo peor, es tenerla al frente y no estar listo para ella. Lo peor, es frustrarte y perder de vista que puedes decir no, para conquistar otro día. Dudo que te vea hasta dentro de un tiempo, y es que definitivamente, si quieres estar con una mujer, tienes que estar dispuesto a perderla, pero tengo el presentimiento de que esto entre tu y yo no se ha acabado. Ni siquiera ha llegado el momento para que empiece, hasta ahora, hemos vivido un prólogo.


Hoy, con tus labios, me hiciste dudar de todo una vez más. De lo que pensaba acerca del amor a primera vista, de lo que creía de las relaciones y de lo que he experimentado.


Comencé diciendo que me encargo de voltearle la vida a las personas. Noten que digo personas! No se trata sólo de mujeres, se trata de cualquier persona que se me atraviese! Y pienso esto porque de eso se trata ser un seductor. Al menos es lo que yo quiero lograr con lo que aprendí en todo este tiempo. Soy un lienzo en blanco donde la gente puede pintar lo que siente. Puedo verte a los ojos y saber qué necesitas, qué le falta a tu vida. Concentrarme en tu alma, en tu subconciente, en tus más profundos deseos. Mostrarte la llave que puede abrir la puerta que te llevará a dónde quieres llegar. Es como si leyendo éstas letras te empezaras a sentir mejor contigo mismo y con lo que sientes... Justo cuando tomas la próxima bocanada de aire hasta tus pulmones, puedes transformar ese aire en las mejores sensaciones que hayas sentido. Y al botarlo puedes darte cuenta cómo tu nervio se calma, se tranquiliza, porque las sensaciones que envuelven tu pecho se vuelven tan grandiosamente placenteras que abruman tus preocupaciones. Y cuando en el futuro empieces a ver este momento en retrospectiva, entenderás que en la caverna de tu mente, el único tesoro, eres tú.


Yo pensaba que me dedicaba a voltear vidas, pero hoy dudo de ello, porque tú... hoy... me has volteado la mía.


Nock!

2 comentarios:

  1. ok, me encanto *.*
    excelente el penultimo párrafo, me sorprendes =)
    qué cosas las que dices! ^^
    VP.

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  2. Gracias VP, me alegra que te guste! ;P

    P.D. siento que te conosco pero no se quien eres la verdad xD

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